El Real Madrid afronta la última jornada de la primera vuelta del torneo de la regularidad mermado por una gran lista de bajas pero sin margen de error para no tirar la competición a mediados de curso, aunque se encontrará en el Benito Villamarín con un Betis con ganas de mantenerse en puestos europeos.
Obligado a romper la mala dinámica del inicio liguero de 2019 que le ha dejado a diez puntos del líder, el Barcelona, y con un panorama desolador para Santiago Solari, con seis ausencias y la duda de Vinicius, el Real Madrid llega al campo andaluz en su momento de mayor necesidad.
No estarán disponibles por lesión Thibaut Courtois, Toni Kroos, Marcos Llorente, Gareth Bale y Marco Asensio. A ellos se une la ausencia por sanción de Lucas Vázquez, por lo que éste se presenta como el partido más complicado para Solari para diseñar un equipo titular. Tanto que hasta se ve obligado a tirar de Isco, que no juega de inicio en la competición liguera desde el pasado veintiocho de octubre, en un clásico que le costó el puesto a Julen Lopetegui.
No le queda más a Solari, que en ataque está en vilo por el catarro de un chico de dieciocho años, el brasileño Vinicius que ha dado el salto de calidad en sus dos últimos partidos, y que tendrá como revulsivo en el banquillo a otro de diecinueve, Brahim Díaz, único fichaje del conjunto merengue en el mercado invernal que debutó en el torneo de Copa nada más llegar.
Mensaje de optimismo
Ese triunfo de la segunda unidad ante el Leganés es un mensaje de optimismo y de un mejor tono físico, aunque ante el Betis regresarán indiscutibles como Varane, Marcelo y Modric, los dos últimos obligados a mejorar con su equipo añorando su mejor versión. Además, todo apunta a la oportunidad, también, en la que fue su casa a Dani Ceballos en un Real Madrid que a domicilio sólo ha conseguido once puntos de veintisiete posibles.
Sólo firma dos victorias en sus ocho últimos partidos ligueros lejos del Santiago Bernabéu, y hasta cuatro derrotas, y ha encajado en lo que va de torneo la friolera de dieciocho tantos, el tercer peor registro de la categoría. La portería la defenderá Keylor Navas en Liga cuatro meses y medio después de cederla a Courtois. En Copa mostró su buen estado a pesar de su inactividad.
