Iago Aspas, delantero del Celta de Vigo y de la selección española, que falló el último penalti en la eliminatoria de octavos de final del Mundial de Rusia contra la anfitriona, señaló que volverá a tirar si el seleccionador se lo pide porque “siempre” seguirá “pidiendo responsabilidad”, que es lo que me gusta”.
El seleccionador español, Fernando Hierro, “me preguntó si estaba dispuesto a tirar y le dije que por supuesto porque ya los tiraba en el Celta”, comentó el jugador y máximo goleador nacional de la pasada Liga Santander en una entrevista con Celta Media, en la que añadió que tuvo “mala suerte de fallarlo, pero para fallar también hay que tirar”.
Aspas se incorporó el lunes a la concentración de la selección al ser llamado por el nuevo seleccionador, Luis Enrique Martínez, para sustituir a Diego Costa, que causó baja por causas familiares.
A pesar de caer eliminados en octavos de final, el delantero gallego consideró una experiencia “grandísima” su primera participación en el Mundial: “Todo vale para aprender. Fue una experiencia grandísima porque nunca había jugado una cita tan grande. Estar en un Mundial era mi sueño desde pequeño”.
Con miras a la temporada 2018-19, Aspas, que se estrenó el pasado sábado contra el Atlético de Madrid, se marca como objetivo superar los 22 goles que logró el pasado curso a pesar de su dificultad. “Siempre me propuse mejorar temporada a temporada. Mis metas siempre son muy altas, aunque sé que será difícil mejorar los números de estos últimos años. Intentaré volver a Europa con el Celta y marcar el mayor número de goles posibles”, indicó Aspas..
Métodos propios
Luis Enrique, nuevo seleccionador español, ya ha introducido sus propios métodos de trabajo al frente de la Selección Española.
Las mayores novedades respecto a las rutinas de Julen Lopetegui radican básicamente en más madrugones —los entrenamientos empiezan a las 10.00—, un trato más distante a la prensa, la prohibición de los teléfonos móviles a la hora de las comidas o los viajes sin parada en Madrid. l
