El Huesca se llevó un intenso derbi aragonés ante un Zaragoza que terminó el partido con nueve jugadores, por las expulsiones en el tramo final de Delmás y Guitián.
Los dos equipos tomaron desde el inicio muchas precauciones no dejando que el rival se hiciera con el mando del partido y con marcajes rígidos, por lo poco se vio poco fútbol.
La batalla se libró en el centro del campo, más poblado por parte del Zaragoza, aunque le duraba poco el balón, mientras que el Huesca fue más rápido y vertical por las bandas, llegando con facilidad al área zaragocista.
El Huesca inauguró el marcador en el minuto 19 por medio de Okazaki en una jugada de Eugeni, y Sergio Gómez centrando este para que el japonés llevara el balón a las mallas en una acción rápida y bien trenzada.
El gol oscense espoleó al Zaragoza, que pasó a dominar territorialmente y encontró el premio a su insistencia con el gol de Soro en el último minuto de la primera parte.
Tras la reanudación, el partido empezó con menor ritmo, aunque poco a poco el Huesca volvió a la carga sobre el área visitante.
El cuadro local se adelantó en el marcador de nuevo en el minuto 69, tras el saque de esquina de Sergio Gómez y toque de Mosquera que aprovechó Josué Sá, que había subido a rematar, para enviar el balón a las mallas obligando otra vez al Zaragoza a buscar el empate.
El último cuarto de hora fue muy intenso, con poco fútbol, y bastante brusco y ello llevó a quedarse al Zaragoza con dos jugadores menos, y pese a ello aún trató de igualar el duelo.
