No hubo milagro en Mestalla y el Arsenal se clasificó con claridad para jugar la final de la Liga Europa el próximo 29 de mayo en Bakú.
El equipo de Marcelino salió en tromba, dispuso de ocasiones en el inicio y acertó en una de Gameiro, pero pudieron ser dos más. La entrada al campo de los jugadores españoles daba garantías, sin duda, pero el Arsenal tiene una característica muy clara. Con media ocasión te hace un gol.
Así, a los 17 de la contienda, Aubameyang anotaba un gran tanto propiciado por la endeblez de la zaga local para despejar el peligro.
No decayó el cuadro valencianista y se lanzó a por el segundo tanto.
Mientras el cuadro levantino atacaba por la banda izquierda, el Arsenal lo hacía por el otro costado y, si los locales llegaban, también el cuadro inglés, que dispuso de una ocasión clara para ponerse por delante a los 36 minutos. El Valencia dominaba pero los ‘gunners’ tenían una contra absolutamente demoledora.
A pesar de los intentos de unos y otros, no hubo más goles en la primera parte. Al descanso se llegó con empate a un tanto.
El Valencia recibió un jarro de agua fría a los 50 minutos, solo cinco después de comenzar la segunda parte con el 1-2, obra de Lacazzette que enterraba buena parte de sus opciones. Casi todas. Luego se sucederían los goles en un encuentro alocado que solo benefició a los de Emery.
Prórroga
La otra semifinal llegó al tiempo reglamentario con prórroga, igualando a unos Chelsea y Eintrach.
En el tiempo de desempate no hubo movimiento en los marcadores, debiéndose resolver la eliminatoria en los lan zamientos desde el punto de penalti. En este cara o cruz el Chelsea se impuso con un tanto decisivo de Hazard (4-3) y una gran actuación de Kepa en la portería.
