El internacional francés marcó el tanto que desató la victoria, el 2-1 en el minuto 67, cuando inició y culminó una acción en compañía de Diego Costa, pero también el primero, el 1-0, a pase de Lemar. Para redondear su partido, aún le dio tiempo a asistir a Koke en el 3-1, ya en el tiempo añadido en el Wanda Metropolitano.
Griezmann ha participado en 18 de los últimos 20 goles de su equipo en la Liga de Campeones, con trece tantos y cinco asistencias; una mina para el Atlético en la máxima competición europea. Este miércoles marcó dos de sus tres ocasiones. Y cuando él tiene pegada, hay muy pocos rivales inaccesibles para su equipo.
Ni siquiera un competitivo Brujas, estructurado en torno a tres centrales, -el bloque rojiblanco se adaptó a su adversario con la misma fórmula del 3-5-2, con Arias y Saúl para las bandas, durante el primer tiempo, aunque cambió al 4-4-2 en el segundo-, ni, sobre todo, el golazo de Danjuma en el 1-1 al borde del descanso frenaron al Atlético, cuya insistencia en la segunda parte fue incontestable.
Tras la victoria, el Atlético suma seis puntos, después de dos victorias, en el grupo A de la Liga de campeones y apunta a estar sin problemas en la siguiente fase.