El Deportivo está a una victoria de superar los 50 puntos que habitualmente otorgan la permanencia en una temporada en que llegó a verse con pie y medio en Segunda B. El vestuario intuye el objetivo, lo acaricia. Así lo ve Salva Ruiz: “La sensación es que estamos a solo un pequeño paso de la salvación. Pensamos que con una victoria ya estaría virtualmente hecho, dependiendo de los resultados. Y le damos mucha importancia al partido del Málaga para estar tranquilo los últimos tres partidos”, comenta.
1 Remontadas en la ‘nueva normalidad’
Desde que se retomó la temporada, el Deportivo se mantiene invicto y se ha repuesto de los contratiempos que han ido surgiendo en los partidos.
“Es verdad que ha habido partidos como Rayo y Oviedo que empezamos jugando mal y hubo que remontar, pero hubo otros como Tenerife o Huesca que no empezamos mal, pero por una cosa o por otra hemos tenido que ir a remolque y la cosa ha salido bien. El equipo está bien, tiene confianza, ganas y va a pelear hasta el final”, expone.
2 Una cita para certificar el objetivo
Si el Deportivo gana en La Rosaleda, certificará la permanencia (aunque no de manera matemática).
“Será un encuentro muy complicado, estamos prácticamente igualados. Ellos también se la juegan y para nosotros es una final. Si ganamos, estaremos prácticamente salvados y será un partido muy difícil. En principio hará mucho calor y será un factor importante”, reconoce.
De hecho, considera que “viendo la temperatura que va a hacer, es un riesgo para los jugadores. Pero bueno, nosotros no somos los que decidimos eso, tendremos que acatar lo que nos digan”, advierte.
La victoria ante el Huesca ha aliviado al Depor. “Sentimos cierto alivio, porque,, de no haber ganado, estábamos a un partido, un punto, una posible derrota que te deja dependiendo de los demás. Nos da confianza, pero no hemos certificado nada, los deberes no están hechos”, incide.
3Dos vueltas, dos versiones del Depor
El equipo actual no tiene que ver con el de la primera vuelta. “Desde que empezó la segunda vuelta venimos haciendo muy bien las cosas. Llevamos cuatro o cinco meses a muy buen nivel. Lo que hay que pensar es que lo de la primera vuelta no puede volver a suceder y no debería haber pasado”, señala.
El juego también ha mejorado, “Cuando llegó Fernando estábamos en una situación muy mala, había que empezar por lo más sencillo: juntarnos atrás, no cometer errores y crecer desde ahí. Era difícil empezar a jugar al fútbol como los ángeles en esa situación. Los resultados te dan la confianza, además el míster ha tenido tiempo de trabajar otras cosas, otros automatismos y eso se está demostrando”, justifica.
