Un protocolo para Riazor
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Un protocolo para Riazor

Un protocolo para Riazor
Panorámica del Abanca Riazor, vacío, durante un entrenamiento a puerta cerrada del primer equipo masculino | quintana

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El Deportivo es consciente de que su afición es su mayor patrimonio. Una hinchada que está renovando su compromiso con el club, superando ya el récord de Segunda B de abonados. Un aliento necesario en estos tiempos y con el que la entidad blanquiazul espera contar. Para ello, ultima la presentación de un protocolo al Sergas.

Siguiendo la ley
Actualmente, con la legislación en la mano, solo se permite en Galicia en recintos abiertos un aforo total de 5.000 personas. El público que asistiese, además, tendrá que guardar una distancia mínima de metro y medio. Asimismo, habrá que cumplir con todas las medidas de seguridad e higiene, poniendo a disposición de los seguidores dispensadores de gel hidroalcohólico y asegurándose de que se no se produzcan aglomeraciones ni a la entrada ni a la salida del recinto.

Será obligatorio, previsiblemente, el uso de la mascarilla durante todo el encuentro, y no se permitirá circulación de hinchas entre las gradas. 

Unas medidas de seguridad que el club expondrá al Sergas para poder contar con aficionados de cara a su estreno liguero el fin de semana del 18 de octubre en Riazor.

Mirando a Abegondo
El club blanquiazul, además, no se olvida del Deportivo Abanca y quiere hacer extensible ese protocolo a las instalaciones de la Ciudad Deportiva, donde compite el conjunto de la Primera Iberdrola que dirige Manu Sánchez. El conjunto femenino, revelación en su primer curso en la élite, contaba con muchos aficionados que acudían cada quince días a Abegondo para animarlas. 

Desde el Deportivo esperan poder acondicionar la instalación para que, con seguridad, pueda seguir habiendo seguidores en las gradas apoyando al cuadro herculino. Cada comunidad cuenta con restricciones diferentes de aforo y el Deportivo y su Federación de Peñas, más concretamente, es consciente de las dificultades que tendrán los desplazamientos este año para la hinchada blanquiazul.

Sin aliento a domicilio
La actual pandemia sanitaria supone un hándicap a la hora de programar viajes para seguir al club coruñés. Además, con menos entradas para el público anfitrión, es probable que los equipos ya no destinen prácticamente localidades para la hinchada visitante.
Las imágenes de cientos de aficionados en las gradas visitantes, apoyando al Deportivo, no se verán este año, pero el club herculino quiere que, al menos en casa, el equipo esté arropado y prepara un protocolo para Riazor.

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