El Deportivo había pedido por activa, pasiva y perifrástica a la afición que renunciara a protestar ayer con motivo el partido con el Fuenlabrada. A ese llamamiento se sumaron las chicas del Depor Abanca. Se trataba de no perjudicar al club y se consiguió.
Los jugadores del Fuenlabrada convocados por su entrenador, José Ramón Sandoval, para el encuentro accedieron al estadio de Riazor minutos después de las 18 horas y, casi media hora más tarde lo hicieron los del Deportivo.
La expedición del equipo madrileño, que se trasladó en dos autobuses, fue custodiada por la Policía Nacional sin que se produjeran incidentes.
Los aficionados del conjunto blanquiazul, que se habían citado a principios de semana para una concentración en Riazor antes del partido, anularon ese acto, así que la llegada del Fuenlabrada fue tranquila y también la del Deportivo.
Eso sí, algunos aficionados reprocharon al conjunto madrileño, a su llegada a Riazor, que hubieran viajado a la ciudad en julio con casos de COVID-19 en la expedición, motivo que llevó a la suspensión del encuentro, no así del resto de la jornada, que tenía que haberse celebrado en horario unificado.
Cancelado
La Federación de Peñas convocó y anuló ayer una concentración de protesta en apenas una hora para atenerse a indicaciones de Sanidad. Los aficionados querían hacer una cadena humana mañana rodeando el estadio. l
