El entrenador del Deportivo, Natxo González, se quedó con la reacción del equipo tras la derrota de Alcorcón. “Volvíamos como locales, era un nuevo reto ver cómo dábamos respuesta después de la primera derrota y estoy satisfecho por la madurez del equipo y la forma de reaccionar tras una derrota”, comentó.
Explicó que al equipo le vio maduro porque no perdió el norte en el partido en ningún momento. “No podemos descomponernos porque el rival está esperando a que cometas un error. En el segundo tiempo, cuando dieron un pasito adelante, nos encontramos con más espacios. Esto es un trabajo de desgaste y de picar piedra”, arguyó.
Los goles los firmó Quique González, pero el mérito es colectivo “En el área contraria es donde se suelen definir los partidos, ahí queríamos ser eficaces, crecer en esa faceta y Quique ha sido decisivo con los dos goles, pero siempre me gusta destacar el colectivo porque para llegar hasta ahí hay un trabajo por detrás”, declaró el técnico.
Otro nombre propio fue el del lateral Saúl García, que se estrenó como titular en Riazor desde que llegó al Depor y, además, tuvo los primeros minutos de la temporada. “Ha estado a buen nivel en el primer partido que compite después de mucho tiempo, ante un rival complicado. En un encuentro duro, con rivales muy rápidos en banda, ha hecho un gran trabajo y me alegro por él”, dijo el míster.
El tercer lateral izquierdo cuajó una buena actuación que al míster no le “sorprendió”. “Estuvo en esa fase que si salía, si no salía, que quería salir y al final acabó quedándose y te encuentras con una situación como la que se ha encontrado y quién sabe lo que te depara el futuro”, indicó el preparador vitoriano.
Del once previsto se cayó Cartabia porque consideró que con Quique “recuperado” era “mejor” esa opción de inicio y al argentino como recambio. Fede jugó de enganche, “Le va como anillo al dedo, es muy vertical, recibe y ve la portería, no especula”, dijo el técnico.
El colombiano Didier Moreno, en cambio, aun “tiene que adaptarse”, aunque Natxo se mostró convencido de que le harán “encajar”.
Además, explicó que “con los cambios” quiso trasladar “el mensaje de que Fede podía “dar desequilibrio” y dejó claro que es importante ir “dando pasitos que a la vez se reflejen en resultados para que generen confianza”. l
