Los últimos minutos del entrenamiento del RC Deportivo de ayer en Abegondo propiciaron malas noticias para los intereses blanquiazules, toda vez que el argentino Fede Cartabia tuvo que abandonar el terreno de juego número II tras sentir molestias en el cuádriceps luego de anotar un buen gol con su pierna izquierda.
Visiblemente contrariado, el jugador intentó estirar la pierna afectada sobre el césped y acto seguido se vio obligado a enfilar rumbo a los vestuarios cabizbajo.
En principio el club aguardará a las próximas horas para comprobar el alcance de este nuevo percance padecido por un futbolista por desgracia propenso a las lesiones.
Aunque a priori no formará parte de la plantilla 20-21 debido a su elevada nómina profesional, Cartabia representa uno de los activos más valiosos del club junto a Diego Rolan.
No en vano, la asesoría deportiva trabaja duro para encontrar acomodo a estos dos jugadores, cuya venta o cesión podría deparar una notable inyección económica a una entidad debilitada como la coruñesa.
A pesar de tener un pie y medio fuera del RC Deportivo, al extremo de Bombal se le ha visto muy integrado en el cuadro blanquiazul desde el inicio de la pretemporada, sonriente y muy dinámico.
Esta mañana el atacante testará sus sensaciones en la Ciudad Deportiva de Abegondo antes de determinar si se encuentra o no en condiciones de ejercitarse al mismo ritmo que el grueso de sus compañeros.
Dejando a un lado el incidente de Fede Cartabia, la escuadra coruñesa completó el penúltimo día de actividad semanal con una sesión de cerca de dos horas, en las que el grupo alternó actividades eminentemente físicas —circuito de fuerza preventiva diseñado por Manuel Pombo y José Ángel Franganillo— con ejercicios con balón como diversos rondos, partidillos de posesión y una pachanga de acoplamiento en espacios reducidos. l
