El actual confinamiento que supone el estado de alarma decretado obliga a ciudadanos y deportistas a agudizar el ingenio para poder seguir manteniéndose en forma unos y en no perderla otros.
Una situación que se vuelve especialmente complicada para los deportistas de élite, como los jugadores del Deportivo y el resto de clubes españoles, así como para aquellos olímpicos, a falta de la resolución del Comité Olímpico Internacional (COI) sobre si se disputan o no los Juegos. Todos ellos trabajan como buenamente pueden en sus domicilios, al igual que millones de ciudadanos de a pie, y en dxt hemos querido hablar con Eduardo Guijarro Alcañiz, psicólogo clínico, que tiene su consulta en Viveiro, sobre cómo pueden llevar los deportistas esta situación y de paso pautas que todos podemos emplear.
¿Cómo pueden afrontar estos momentos de confinamiento los deportistas, sobre todo los de élite, como los futbolistas del Deportivo, que están viendo cortada su preparación y su forma física?
Es una situación complicada para ellos, pero el responder cómo lo pueden llevar es difícil en la medida en la que cada persona es distinta y no todos lo van a vivir igual. Me imagino que será más complicado para aquellos que no sean de élite que para los que sí lo son, en el sentido de que puede que estos tengan más medios en casa para seguir ejercitándose y los otros puede que no los tengan y será más complicado. Si no das salida a la necesidad física de entrenar puede afectar y mucho al rendimiento competitivo cuando esto pase. Como esto se alargue, que yo me temo que esto se va a alargar, van a empezar la pretemporada otra vez. Cada persona es distinta, pero ¿qué pueden hacer? En la medida de sus posibilidades seguir entrenando, que pienso que es importante, además de descansar. Asimismo, podrían tomárselo como se podrían tomar una situación de concentración, aunque en este caso con la particularidad de que están aislados, claro.
Me esta sorprendiendo gratamente la reacción de la gente
¿Y toda esa gente que no pueda hacerlo, porque no disponga de facilidades en sus casas o que antes fuese a los gimnasios, ¿qué puede hacer o qué pautas puede seguir?
Hay que mantener los horarios, es algo fundamental, sino los biorritmos se van a ver afectados, por un lado. Por el otro, está claro que no podrán entrenar, los que no cuenten con gimnasio en su casa, como entrenaban cuando estaban en situación normal, pero sí que es bueno que se vayan realizando otro tipo de ejercicios físicos, que no necesiten de aparatos, para mantener la forma. Y los que están en forma, tratar de no perderla o, intentar perderla lo menos posible. El problema es que mucha gente joven es probable que se meta en casa y se pueda pasar todo el día jugando a la Play (Station) con lo cual se acuesten de madrugada y se levanten para comer y no creo que sea bueno para el cuerpo y menos para la mente.
¿Puestos en forma o al menos no perdiendo la que tenemos a nivel físico, ¿cómo entrenamos la mente?
Pensando en que estamos en una situación de auténtico privilegio. Es decir, vivimos en una sociedad en la que sin salir de casa podemos tener un nivel de comunicación fantástico con todo el mundo. No hay contacto físico pero podemos hablar con la gente por teléfono, por videollamada, por redes sociales… Miles de formas para conectarse y mantener la comunicación con la gente. También tenemos la opción de entretenimiento cómodo, que nos exige poco esfuerzo, como la televisión o las plataformas de streaming, puedes leer de forma online… En definitiva, vivimos en una situación privilegiada en ese aspecto. Imaginemos esta coyuntura, por ejemplo, hace 40 años, cuando no había teléfonos móviles y había que estar conectados a la radio para saber algo. Ahora mismo no estamos en esa situación para nada y es algo que tenemos que plantearnos. Al igual que el aislamiento es algo importante para evitar que esto se siga propagando de la manera en la que iba a hacerlo. Si conseguimos que se vaya dosificando (el contagio) vamos a evitarnos el problema del atasco sanitario, que es algo muy gordo. Tenemos que mantener la cabeza fría en todo momento. Tengo que decir que me está sorprendiendo gratamente cómo está reaccionando la gente, siempre hay alguno que da la nota, pero la inmensa mayoría está reaccionando como una sociedad más madura de la que en realidad somos, o a lo mejor es que somos más maduros de lo que creíamos. En psicología no podemos nunca generalizar, porque cada persona es un mundo, y algo a la que una le va bien a otra le va mal, pero creo que si mantenemos la calma y somos conscientes de que lo que estamos haciendo, por qué lo estamos haciendo y para qué lo estamos haciendo nos puede ayudar bastante. Entrar en pánico es un error gordísimo, que por desgracia ya hemos cometido. Me refiero, por ejemplo, a esas imágenes cuando saquearon los supermercados, los vídeos en la televisión, cuando sabes que van a seguir abiertos. Eso fue un atentado para la salud y fue producto del pánico.l
