Eneko Bóveda fue ayer una de las bajas en la segunda sesión de trabajo de la semana en la Ciudad Deportiva de Abegondo. El lateral vasco, con unas molestias en el cuadríceps, se quedó trabajando por precaución en el gimnasio.
No obstante, la dolencia muscular no es grave y se espera que pueda reincorporarse al trabajo junto al resto del plantel en los próximos días, en una semana larga de entrenamientos.
Enfermería
Tras recibir el alta médica Gaku Shibasaki este martes, quedan dos jugadores trabajando al margen: Mamadou Koné y David Simón. El costamarfileño causó baja de última hora ante el Numancia debido a unas molestias en el muslo, mientras el lateral canario se recupera de la operación de pubalgia a la que fue sometido el pasado mes de noviembre.
Los tres jugadores comenzaron con trabajo específico en el interior de las instalaciones de Abegondo. Mientras tanto Koné como Simón terminaron el trabajo sobre el verde bajo la tutela del readaptador Fran Molano, Bóveda prosiguió en el gimnasio con las tareas.
Aunque en principio Vázquez había restado importancia a los problemas musculares del ariete, habrá que esperar a ver cómo responde durante la semana y si puede volver al trabajo con sus compañeros y tener minutos en el duelo copero.
Un choque al que espera llegar Emre Çolak, primer fichaje invernal, que, tras intercalar sesiones en solitario y con el grupo, sumó ayer su segundo entreno completo junto al resto del plantel.
El turco apura su puesta a punto para poder ayudar al equipo en este inicio de la segunda vuelta y está llamado a ser uno de los jugadores diferenciales del Deportivo.
En el caso de David Simón, su evolución es buena, y la idea es que en esta semana pueda ir incorporándose, de forma parcial, a los entrenamientos grupales.
Los plazos tras la operación de pubis en los que se mueve el club indican que entre febrero y marzo estará listo para volver a competir y dejar así atrás una lesión que lo condicionó ya el curso pasado.
