Entramos otra vez en la batalla, el Depor luchando por sobrevivir entre los grandes del fútbol español.
Dicho esto y sabiendo lo que hay económicamente, les traslado dos referencias que me preocupan singularmente.
En el plano deportivo, tras la primera jornada sufrida ante el Real Madrid, prolongo mis dudas sobre el aspecto defensivo del equipo. Siguen los mismos errores, falta de concentración, ubicación y contundencia. Insisto en el bajón 'metafísico' de Sidnei. Algo sorprendente. A todo ello, tenemos que añadir ahora el tema de la portería. Este equipo necesita un salvador, alguien que con varita mágica 'aporte puntos', como lo hizo Lux en la recta final de la pasada campaña, sólo con marcar en la puerta contraria no llega.
Fue la primera jornada, hay que esperar. Ya sé que el Madrid deja jugar, pero hizo daño ofensivo. Faltó definición, pero eso puede cambiar. Una nota de esperanza a pesar de la derrota. Estar de últimos en la clasificación hasta puede ser bueno, sólo se puede mejorar.
Voy a por la segunda andanada, me adentro en los despachos de Riazor. Menudo espectáculo el ofrecido por el técnico Pepe Mel, el presidente (en diferido) y el 'sheriff' deportivo de la institución Richard Barral, en la previa del campeonato.
Pobre imagen de unidad. En primer lugar salió el técnico, trasladando a la opinión pública una charla privada con su `jefe', en la cual, hipotéticamente, le informaba de que podría disponer de Lucas Pérez para el próximo partido ante el Levante.
Toda una implicación presidencial. Impropia del respeto que un empleado le debe propiciar a su máxima autoridad laboral. ¿Cuál era el propósito?... Hasta lo de Fernando Vázquez podría quedar en una nimiedad.
Como no quedaba más remedio, tuvo que intervenir el responsable deportivo, dejando en mal lugar a su propio técnico: "Debió entender mal lo que se le dijo". Anexionando una `milonga' sobre lo difícil que era fichar a Lucas y la incompatibilidad de poder incorporar, paralelamente, a un portero de calidad.
Y a todo esto... ¿Qué pensaría el presidente?. Intuyo que sería algo así, aunque suene duro: "¿Este tío es tonto, o se lo hace?".
En fin... A ver si cada uno está en su sitio y se pone a trabajar en lo que, en teoría, está preparado.
Finalizo con un 'Me gusta', por la colaboración reinante entre los Riazor Blues y el consejo de administración deportivista. Hablando se entiende la gente.
Como siempre un placer.
