VALORANDO LAS CARRERAS
lll
17º-23º

VALORANDO LAS CARRERAS


Usuario

Cada cierto tiempo y kilómetros, toca llevar el coche al concesionario, para su mantenimiento. Y después de algunos días, es habitual recibir una llamada telefónica por parte del fabricante, en la que solicita al cliente que le manifieste su grado de satisfacción con el servicio recibido en el concesionario en cuestión. Este método tiene como fin evaluar la calidad de la atención recibida por el cliente. ¿A quién consultarle si no? ¿Acaso preguntamos al concesionario qué tal han trabajado? Pues no, quien debe valorar la atención al cliente, es el propio cliente. Parece obvio. Sin embargo el automovilismo deportivo, nunca exento de singularidades, aplica una filosofía diferente…

Bajo mi punto de vista, las carreras de coches son eventos de ocio gestionados por federaciones o empresas promotoras (identificables como los 'fabricantes’), que gestionan distintos campeonatos (cada uno de los cuales es una ‘marca’) y que ponen en marcha las escuderías organizadoras (que son algo así como los ‘concesionarios’), a disposición de participantes y público (que cada uno a su manera, son los 'usuarios’ o 'clientes’).

Quien debe valorar la atención al cliente, es el propio cliente. Parece obvio

Dentro de este planteamiento, el argumento más sólido para juzgar la calidad de las carreras debería venir de la mano del público y los equipos. Valoremos: ¿Se registra una gran participación de pilotos, que quieren repetir? ¿Se consigue atraer a mucho público, y que éste salga satisfecho? ¿Se ha generado una gran repercusión en los medios? Si la respuesta es sí, estaremos hablando de una carrera formidable. Pero aquí quien decide y valora la calidad, no es el cliente…

Las Federaciones aplican sus propios códigos y baremos para valorar qué carreras son mejores, qué eventos deben formar parte de sus campeonatos, y a qué organizadores deben premiar. Hay observadores encargados de elaborar informes de valoración, pero incluso a pesar de eso, a menudo no es fácil entender a qué responden determinadas decisiones. En cambio otras veces basta echar un vistazo a los miembros de las asambleas, las comisiones, las juntas directivas... y todo es más sencillo de comprender.

VALORANDO LAS CARRERAS

Te puede interesar