Unicaja vuelve a ganar después de cinco derrotas consecutivas
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Unicaja vuelve a ganar después de cinco derrotas consecutivas

Unicaja vuelve a ganar después de cinco derrotas consecutivas
El alero polaco de Unicaja Adam Waczynski (d) lanza a canasta ante Tyler Honeycutt, alero del Khimki Moscú (EFE)

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El Unicaja rompió una racha de cinco derrotas consecutivas al derrotar al Khimki de Moscú en un duelo ofensivo con 13 triples de 27 intentos de los cajistas por 16 de 37 del conjunto ruso.

Ocho triples entre los dos equipos el primer cuarto mostraron el poderío ofensivo con dos artilleros, el escolta serbio del Unicaja Nemanja Nedovic y el jugador que más cobra de la Euroliga, el también escolta Alexey Zhved, que brillaron desde la línea de 6,75.

El partido era divertido con un ritmo frenético, interesante para el espectador.

Igualdad máxima 27-26, y algo desasistidas las defensas, que intentaron arreglar en el segundo periodo, aunque tanto el Unicaja como el Khimki seguían con su brillantez anotadora, donde Zhved tenía toda la responsabilidad de ataque, y en el rival, los puntos estaban más repartidos, pero con un gran porcentaje de tres de los cajistas 47-48.

Ninguno de los dos equipos se distanciaba en el marcador, con ventajas cortas o empates, pero en el tercer periodo al Unicaja le faltaba algo de intensidad para intentar del despegue 54-57, minuto 26.

Los triples seguían entrando por parte del base estadounidense Ray McCallum y de Nedovic, y del base estadounidense Charles Jenkins, lo que era un duelo de tiradores sobre el parqué del Martín Carpena de Málaga (67-66, minuto 30).

Los últimos diez minutos auguraban emoción y espectáculo, donde el Unicaja tuvo más presencia, a pesar de varias elecciones erróneas en ataque y una antideportiva al McCallum por cortar un contraataque, 75-75, minuto 34.

Había desperdiciado la máxima ventaja hasta esos momentos 75-68, con dos triples del alero polaco Adam Waczynski.

El Khimki llegó a ponerse por delante con otro triple del alero estadounidense Anthony Gill, pero un parcial de 11-0 de los malagueños con dos triples del alero Dani Díez y una técnica al banquillo ruso por simular le llevaron a controlar el encuentro 86-78, minuto 37.

Desde ese momento otra vez fue un duelo de pistoleros con Díez en estado eufórico y por supuesto Shved, excelente jugador, aunque el partido estaba cerrado y concluido con otro gran jugador como el pívot estadounidense James Augustine, con 27 de valoración.

Al final triunfo del Unicaja, el cuarto en la Euroliga, por 93-84, que corta una racha de dos victorias a domicilio consecutivas del Khimki.

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