El partido en As Eiroas no pasará a la historia del fútbol. Pero cuando no estás especialmente inspirado también hay que saber encontrar argumentos para ganar el partido. Y así lo hizo el Bergantiños. No se sintió cómodo hasta mediada la segunda mitad, no produjo el caudal ofensivo de otras ocasiones y su hombre-gol (Rivera) no estuvo acertado de cara a puerta. Sin embargo, se mostró seguro en defensa y esperó paciente hasta que llegara el gol que desnivelara el encuentro ante un Somozas que no se acabó de creer que podía hacerle daño a los de Carballo.
La primera mitad tuvo tramos que pedían a gritos una siesta. El encuentro enfrentaba a dos de los aspirantes a finalizar la liga en el playoff pero el respeto mutuo se llevó por delante la brillantez y la pegada que se le presuponen a estos dos equipos.
Durante la primera mitad, Iago Blanco picó a la espalda de la zaga, Antas trató de bajar el balón para asociarse por dentro sin demasiada suerte, Toni sobresalió barriendo todo lo que caía por su zona y los centrales Iago López y Roberto Prieto contuvieron el ímpetu de un Fran Monroy que cada vez que arranca parece una estampida. Y poco más.
De hecho, hasta el minuto 45 no llegó la primera oportunidad en la que uno de los dos porteros estuviera un mínimo en aprietos. Le tocó a Javi Seral, que detuvo sin demasiados problemas un cabezazo potente de Baleato tras una falta botada por Iago Blanco.
Descanso deseado
El público agradeció el descanso. Y los equipos también. En la segunda mitad cambió el cuento y ambos dieron un paso al frente, aunque fue el Bergan el que se hizo con el control del partido. A las primeras de cambio, Antas ya pudo abrir la lata con una volea bloqueada por un defensa del Somozas. Poco después, Jorge Sáez remató un centro de Rivera sin dejar caer el balón pero su disparo se marchó lamiendo el poste de la portería de Javi Seral.
El Bergantiños siguió insistiendo ya con Rodri en el campo, que entró por un intermitente Antas. De hecho, el ex del Barco le dejó un caramelo a Rivera en el minuto 75 pero el delantero mandó el cuero por encima de larguero cuando la grada ya cantaba el gol. No fue la única del ‘9’ en el tramo final de partido. En el 78 descolgó un centro de Toni en el área pequeña, se orientó el balón, lo hizo todo bien y se quedó solo ante Javi Seral. Sin embargo, se le hizo de noche y en el último momento apareció Álex Pérez para desviar el disparo a bocajarro.
Pero Rivera tiene más vidas que un gato. Y volvió a aparecer. El delantero cazó un balón en tres cuartos en el minuto 85, vio el desmarque de Rodri y le puso el balón en ventaja para que su compañero fusilara a Javi Seral sin contemplaciones. 1-0 y estallido de alegría en las gradas de As Eiroas.
A pesar del mazazo, el Somozas tuvo una opción para empatar. Un córner botado por Gerardo le cayó en el segundo palo a Silas, que lo metió de nuevo a la olla. Uzal se encontró el balón encima y no pudo acomodar a tiempo el cuerpo para rematar a la red.
NOMBRE PROPIO
RODRI El delantero del Bergantiños fue determinante en el triunfo de su equipo a pesar de comenzar de suplente. Saltó al campo en el minuto 62 por Antas, dio una asistencia de gol perfecta que no aprovechó Rubén Rivera y marcó el gol de la victoria con un zambombazo a pase del propio Rivera.
