El Betanzos logró la permanencia matemática el pasado domingo con un empate en casa ante el Ribadeo (1-1). Un éxito para un recién ascendido que además tuvo que lidiar con siete descensos a Primera debido a los arrastres. Su entrenador, Andrés Andrade, volvió a conseguir el objetivo del club en su segunda campaña en el banquillo betanceiro. El técnico, que el pasado curso logró el ascenso a Preferente y el título de Copa Coruña, hace balance de la temporada que está a punto de finalizar.
¿Cómo valoras la temporada del Betanzos?
Estoy satisfecho porque el objetivo marcado era permanecer en la categoría y consolidarnos, que no fuera un salto para volver atrás. Sobre todo estoy satisfecho por el comportamiento del equipo. Hicimos una apuesta por gente con menos experiencia en la categoría, con ganas de crecer y con capacidad para competir. El inicio no fue bueno pero el equipo siempre trató de dar la cara y nunca bajamos los brazos. El compromiso de los jugadores siempre fue del cien por cien y eso fue la clave.
¿Por qué os habéis salvado?
El equipo arrancó mal y eso, unido a la inexperiencia de todos y a un equipo joven con una propuesta atrevida, nos pasó factura. No éramos capaces de sacar buenos resultados aunque competíamos bien. Pasamos una racha también mala en noviembre y diciembre fruto de lesiones de jugadores importantes y eso nos hizo bajar un poco el rendimiento global, pero la gente siguió trabajando. Ese inicio irregular privó a los jugadores de sacar el fútbol que llevan dentro y les hizo jugar un poco encogidos. Nos faltó esa confianza por tener el agua al cuello hasta que volvimos a ser nosotros mismos.
¿Tienes alguna espina?
Si el equipo hubiera arrancado mejor, creo que está capacitado para hacer una competición un poco mejor de la que hemos hecho. Tras recuperar a toda la gente solo perdimos un partido fuera en la segunda vuelta. Jugamos fuera contra Noia y Estudiantil y solo perdimos con el Arteixo. Hemos dado la cara siempre y eso fue a través de recuperar la autoestima y recuperar a la gente.
Este curso nos ha enseñado a todos que hay que respetar las categorías
¿Cómo un equipo que no gana hasta la jornada 9 puede evitar siete plazas de descenso?
El hecho de no ganar en la primeras jornadas era engañoso porque no perdíamos claramente. Así que tanto Fran (Pérez) como yo continuamos con el trabajo pensando a medio plazo. A veces, si sigues insistiendo en lo mismo, vas recuperando tu ADN y las cosas van saliendo. Fran y yo pensamos que no había que dar giros bruscos y solo matizar pequeñas ideas y corregir puntos débiles. Trabajamos con la calidad de los jugadores y además nunca hemos bajado el nivel de asistencia a los entrenamientos. Desde dentro del club, tanto Fran como Buta como yo, estamos supersatisfechos con ellos. Y además la aportación de Fran y Buta esta temporada ha sido fundamental para lograr el objetivo.
¿Qué has aprendido esta temporada?
Esta temporada nos ha enseñado a todos que las categorías hay que respetarlas siempre. Los saltos de categoría suponen un esfuerzo a todos los niveles porque los rivales son mejores, tienen mejores cualidades y las desarrollan a su máxima expresión. Cada partido es una batalla y cada punto hay que lucharlo mucho. Nos ha enseñado que las categorías están para algo y se nota la diferencia. Aquí ya no ganas un partido porque sí. Para nosotros conseguir una victoria suponía un mundo.
¿Cuáles son las fortalezas de este equipo a nivel de juego?
Este equipo a nivel defensivo es bastante solidario. Tratamos de ser generosos en el sentido del esfuerzo, de ir a por los partidos, de hacer una presión avanzada... Pretendemos defender en bloque. No somos un equipo que sepamos jugar a cerrarnos y a que el rival cometa errores. Tratamos de forzar el error. Otra cosa es que la calidad del rival te lleve a encerrarte aunque esa no sea tu idea. Y a nivel ofensivo tratamos de adaptarnos a las diferentes circunstancias. Tenemos buen manejo del balón, tenemos un equipo bastante dinámico y tratamos de aprovechar el juego directo y las transiciones porque son fundamentales. No puedes cerrarte en un único modelo porque condicionas tu juego. Tratamos de adaptarnos al rival, al campo y también al momento de partido. No es lo mismo jugar en el minuto 20 que en el 80.
¿Y las debilidades?
A veces cometes errores en defensa desde el punto de vista individual o a veces nos ocurre que el equipo se hace un poco largo. Pero nunca sabes si son tus errores o son las fortalezas del rival que te llevan a eso. Además, el equipo a veces no es suficientemente contundente en defensa pero no tenemos una debilidad clara, son fruto del juego del rival.
El club valora que los jugadores no bajaran los brazos cuando se empezó mal
¿Qué debe hacer el Betanzos para crecer el próximo año?
Lo más inmediato es disfrutar de esta semana. Llevamos todo el año sufriendo mucho, desde la directiva hasta los jugadores pasando por Dani Rodríguez (director deportivo) y los entrenadores, y ahora queremos disfrutar porque dejar al Betanzos en Preferente era muy importante para que el proyecto no se convirtiera en agua de borrajas.
¿El club apostará por la continuidad de la plantilla?
El club está muy satisfecho con la gente que tiene y con la aportación tanto de los que siguieron del año pasado como de los nuevos. El club valora mucho el hecho de que no bajaran los brazos cuando el equipo empezó mal. Porque eso y su calidad nos ha permitido hacer una buena campaña. Además, el club también ha respondido con mucha paciencia con entrenadores y jugadores, respaldando nuestro trabajo cuando hubo momentos malos. Se pusieron de nuestro lado para animar en vez de recriminar.
¿Vas a seguir la próxima temporada en el Betanzos?
Aún no lo hablamos. Todos estamos contentos pero ahora toca disfrutar y ya hablaremos las próximas semanas.
