Sin triple no hay regalo
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17º-23º

Sin triple no hay regalo

Sin triple no hay regalo
BASQUET CORUÑA

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Un ordenado y rocoso Huesca acabó con una racha de cuatro victorias de un Basquet Coruña que pagó con derrota su escasísimo acierto (5 de 24) en los triples, precisamente una de las claves –si no la principal– del éxito en las jornadas precedentes.

El partido respondió al guion esperado. Al menos a la parte que atañe al Huesca, aunque no lo hizo hasta el segundo periodo. En el primero, el acierto de Flis –anotó 8 de los 10 primeros puntos locales– mantuvo a una ‘marea naranja’ un tanto acelerada y precipitada ante el mayor orden y paciencia en ataque de su rival.

En ese orden reinó Fontet, que aportó 4 puntos al 0-6 que dio la iniciativa (5-10) a los visitantes. Aunque entre Flis y Olmos nivelaron de nuevo el barco, Motos y Pérez lo hicieron zozobrar en los instantes finales del cuarto (20-23).
 

Espesura
La pausa dio paso al guion. El Huesca apretó los dientes atrás y el BC cayó en su ritmo espeso. El resultado, un 1-2 de parcial en los tres primeros minutos y máxima renta para el cuadro oscense (21-27).

Aranzana y sus pupilos aceptaron el envite con más agresividad atrás y más manos buscando el balón. Olmos firmó la primera canasta local en juego cuando el reloj había consumido ya 4 minutos, y disparó a su equipo, que firmó un 9-0, estirado hasta 12-1, después de que una inexistente falta deportiva de Marzo a Monaghan reportase 4  tantos al inquilino del Palacio.

Tal vez enrabietado por la injusticia, Marzo encadenó 5 puntos –sus primeros en el partido– para poner en el marcador un nuevo empate (33-33) que Olmos rompió con dos tiros libres, la última anotación de la primera parte (35-33).

El pívot alicantino también abrió el fuego en el tercer cuarto, Monaghan sumó 3 puntos –su primera canasta–, Flis hicio lo propio tras un mate de Fontet y Gilling redondeó el parcial de salida de 10-2 para dar a los locales su primera –y a la postre única– renta de dos dígitos (45-35).

Pero la tercera falta de Olmos lo cambió todo: 0-8 sin él, a Gilling le cayó la cuarta, a Chuku la tercera, Cooney fallaba un triple tras otro (0 de 6 al final) y Sonseca seguía sin aparecer en ataque. Lo hizo en el tramo final con un par de chispazos que mandaron el partido al acto final con cuatro de diferencia (55-51).

Las complicaciones no cesaron en el inicio de los últimos 10 minutos. El Huesca, que durante la remontada había hecho mucho daño en el rebote ofensivo, cortando el ritmo de los locales cuando por fin estaban pudiendo correr, se aprovechó de varios despistes del Coruña bajo su aro para retomar la delantera (55-56), gracias a un triple de Pavlovic.

El BC, que tardó 2:30 en sumar, encontró aire en 6 puntos seguidos en la pintura... de sus bases. Pero entonces despertó del letargo el más valorado y máximo anotador de la competición: Kevin van Wijk.

Puntos de MVP
El ala-pívot holandés firmó 10 puntos consecutivos que voltearon la tortilla (63-66), y luego dos más que sacaron al Coruña de rebufo (65-70) a falta de 90 segundos y justo después de que Olmos (2) y Flis (1) errasen tres tiros bajo el aro en la misma jugada.

Pavlovic, que tan solo había anotado 3 puntos, se convirtió en el protagonista de los segundos finales. Primero, al anotar tras rebote ofensivo en el poste bajo (67-72), y poco después al robar el balón en un saque de fondo de Monaghan en campo rival para rematar  con un bandeja (69-76) y dejar a la afición coruñesa sin regalo de Navidad.

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