El Basquet Coruña no pudo con un Oviedo que sigue invicto en la LEB Oro, mientras que los hombres de Gustavo Aranzana encajan su primera derrota en Riazor, la segunda de la temporada. Y eso que, tras dos cuartos muy igualados y un tercero bastante decente, los herculinos afrontaban el último parcial con diez puntos de ventaja. Sin embargo, un mal último cuarto provocó que finalmente el triunfo se fuera a tierras del Principado.
Aranzana sigue confiando en los titulares habituales, que también son los que consiguen la mayoría de los puntos. Sanz, Cooney, Gilling, Flis y Hernández Sonseca se están consolidando como los hombres fuertes del nuevo entrenador naranja. Ellos fueron los autores de 67 de los 71 puntos anotados ayer por el Basquet Coruña. Los otros cuatro solo los aportó uno de los suplentes, Mike Torres. Por su parte, Oviedo también repetía quinteto con respecto al choque ante Azpeitia.
La igualdad reinó antes del descanso, hasta tal punto que en el minuto veinte todo estaba por decidir (38-29).
En la reanudación, el Basquet Coruña ofreció sus mejores minutos. Sobre todo en defensa, dejando a su rival en solo ocho puntos.
De esta manera, los hombres de Gustavo Aranzana afrontaban con un buen colchón el desenlace del encuentro.
Pero el último cuarto fue una pesadilla total para los anfitriones. El equipo asturiano recuperó el acierto en ataque, mientras que el coruñés se atascó de tal manera que, aunque lo intentó, fue incapaz de volver a retomar la iniciativa en el marcador. Al final, 71-76, y nueva muestra de que el Basquet Coruña necesita mejorar.
A nivel individual, el más valorado del cuadro naranja fue Eduardo Hernández Sonseca (23), con 12 puntos, 8 rebotes y 3 asistencias. Por el equipo visitante, Mouhamed Barro llegó hasta los 22, con 16 puntos y 9 rebotes.
Los coruñeses ya piensan en su próximo compromiso, el que disputarán el domingo en el Paco Paz ante el Ourense (19.00 horas), que el martes también perdió (89-80) frente a Azpeitia.
