El Deportivo ha iniciado los contactos con la Agencia Tributaria después de que el Tribunal Supremo fallara en contra del club coruñés en la disputa de cerca de 22 millones de euros que han engrosado la deuda privilegiada (sin quita ni espera) en lugar de formar parte de la ordinaria y la subordinada (como se había acordado en el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña y en la Audiencia Provincial).
Esta semana, tal y como avanzó este diario, se ha producido el primer encuentro entre ambas partes. El presidente blanquiazul, Tino Fernández, está al frente de esas conversaciones con el principal acreedor del Depor, con el que firmó el convenio singular en marzo de 2014.
El club ha encontrado buena predisposición por parte de Hacienda, aunque la primera reunión ha acabado, como es lógico, sin un acuerdo sobre cómo poder afrontar con mayor flexibilidad el pago de la deuda. El convenio con el Fisco recoge un calendario de pagos que concluye en 2023, lo que obligaría al Deportivo a apretar el cinturón en los próximos años para acometer las cantidades pendientes.
DIÁLOGO
Habla con Hacienda y analiza las posibles salidas para flexibilizar pagos
El encuentro ha servido para poner de manifiesto que hay un margen importante de tiempo para el diálogo. No se han producido avances significativos, pero al menos hay margen para negociar, tanto con Hacienda directamente, como pasar a la segunda vía, que es la de refinanciar la deuda a través de una entidad bancaria o un fondo de inversión. En este último caso nunca se plantearía el escenario de que alguien se hiciera con el control del club, sino que se convirtiera en acreedor de la entidad blanquiazul. Así, el Deportivo podría afrontar la deuda con mayor comodidad, sin ahogarse.
Más difícil es conseguir que Hacienda suavice las condiciones del convenio y varíe los plazos. La Agencia Tributaria está muy condicionada por las leyes a las que debe ajustarse, a los controles que impone y la capacidad de negociar se minimiza. Es más sencillo si en el escenario aparecen nuevos acreedores.
El Deportivo no está descartando ninguna opción y trabaja en todas ellas, desde las más clásicas (entidades financieras) a las exóticas (fondos) para encontrar la óptima. Lo primero es sentarse con Hacienda y emprender el diálogo, porque incluso para dejar a cero la deuda con el Fisco se necesita un acuerdo negociado. Además del dinero, en juego están las garantías que tiene que liberar la Agencia Tributaria.
Paralelamente, se sigue explorando desde el Deportivo la vía judicial, en el sentido de estudiar en profundidad la sentencia del Tribunal Supremo para tratar de encontrar algún resquicio favorable.